Ya tenemos fecha!

Elegir la fecha fue relativamente fácil: los dos queríamos verano, en concreto, junio, el mes por excelencia. Mi argumento era bastante peliculero... ¿habéis visto Siete novias para siete hermanos? Desde que ví esa película y, en concreto, la escena donde todas sueñan con sus bodas, mientras bailan entre las camas con dosel, sabía que yo también quería casarme en junio.

Pero claro, hay que ver la disponibilidad de iglesia/sitio para los sábados de junio de 2010. (Tengo que aclarar que estos primeros post los escribo mirando un poquito atrás. Intentaré ponerme al día lo antes posible, tampoco he avanzado tanto). Era junio, quedaba exactamente un año. Pensábamos que teníamos tiempo: ¿resultado? En un primer tanteo telefónico no encontrábamos un sitio decente que tuviera un sábado de junio libre. Siguiente opción: viernes. ¿Qué tal el 25? ¡Bingo! (Y no me hagais la rima...)

No voy a hacer la declaración de fe (que me encantó, una opción muy valiente) que hizo Adolfo en su blog. Lo resumiré en que somos creyentes... pero no demasiado católicos. Pero él sí quería mantener esa tradición y me lo está demostrando visitando la Iglesia los domingos, como buen cristiano. Así que ahí ganó él. Yo pensaba más en algo así como una bendición, más cercana y alegre... pero todo se andará...

La iglesia elegida fue a la que yo iba de niña (cuando sí "practicaba", incluso hacía de monaguillo): Nuestra Señora de la Asunción, Galapagar. Lo bueno de que no fuera Madrid capital es que no había problemas con las fechas. ¡Y menos un viernes!  Además de mi relación sentimental con esta iglesia, resulta que el párroco actual es un señor encantador al que yo conocía de otras iglesias. Vaya, de éstos en los que en las homilías te enteras realmente de lo que está diciendo.

Cuando fuimos a hablar con él nos explicó todos los trámites que teníamos que hacer y los tiempos en los que había que hacerlos. Nos dijo que una pareja había presentado los papeles de permiso del Obispado, ¡unas horas antes de la boda!

Claro, porque al querer casarnos en una parroquia que no nos corresponde (por distrito, con respecto a donde vivimos), tenemos que pedir unos permisos y otros trámites, pero esto ya lo hablaremos.

FOTO: www.soledadgalapagar.org

As in Seven Brides for Seven Brothers I always wanted to marry in June (because the girls who married in June, are forever brides!). But a year in advance, we could only manage to get a Friday for our wedding. We had chosen the church, in Galapagar, an old fashion church where I used to go when I was a child.